LA ATERRADORA ESPONTANEIDAD DEL VACÍO

JUST BREATHE

Si sembrás tus flores en jardines ajenos,

sus dueños sentirán las raíces apretándoles el corazón.

Y nadie las verá florecer. Ni siquiera vos.

Si tratás de huir de un salto hasta el infinito,

en algún momento chocarás con una estrella.

Aunque sea la última, la que está en el límite de la nada.

Pero corré, a pesar del dolor de las piernas acostumbras sólo a arrodillarse, corré.

Volá, aunque tus alas se hayan quemado en vidas pasadas.

Olvidá todo aquello que se ha quedado fijado sin permiso en tu piel.

Recordá lo que te obligaste a olvidar, porque sabés que nunca se fue.

Llorá con todo el cuerpo y solo detenete cuando las palmas de tus manos sean cartón de la sequedad.

Bailá hasta convertirte en sombra a través del vaho que desprende la manada.

Reite como si realmente fuera posible la alegría.

Lo es.

Y luego, respirá, respirá, respirá, mantenete respirando.

No hay pecado que no pueda ser redimido,

Porque la redención es tan falsa como el pecado mismo.

Pero por favor no te detengas…

No hay nada más aterrador que la espontaneidad del vacío.

2 Comments
  1. Juan dice

    Qué maravilla!

  2. Carolina Córdoba dice

    Maravilloso, sutil, lúcido .
    Duilio, lío
    ,Duelo,
    léelo a
    Duilio..

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